|
|
Artículo realizado por
Fernando Rodríguez.
![]() |
Portada del Rick Dangerous |
Me juego algo a que si este juego llegó a caer en tus manos resultó ser uno de los más adictivos a los que jugaste en tú vida. Desde luego, yo no me encontré con ningún otro juego, salvo el "Raibow Islands", que más me enganchará al Spectrum. Y es que, este "Rick Dangerous", era uno de esos títulos que crean afición.Tenía una dificultad, originalidad y adición difícilmente superables.
El juego no era más que un arcade en el que debíamos de tomar el papel de una especie de Indiana Jones, es decir, era una parodia al aventurero por antonomasia pero chicos, creo que Indy puede sentirse muy orgulloso de que un juego como lo que fue "Rick Dangerous", se encargara de parodiarle.
El Rick Dangerous, fue editado en el año 1989 y supuso el regreso de una casa, Firebird, que llevaba bastante tiempo sin publicar nada. Puede decirse que este juego volvió a traer a la casa del "Ave Phoenyx" a las primeras posiciones del panorama Europeo. El juego se vendió bien, recibió críticas excelentes y, cómo no, generó una segunda parte que, por cierto, salió cuando comenzaba la agonía de los 8 bits. Cabe decir que, en estos tiempos en los que fue editado el "Rick Dangerous", los distintos géneros reinantes empezaban a tender, descaradamente, hacia la vídeo aventura. Se empezaban a crear arcades en los que había que hacer algo además de acabar con unos cuantos sprites y el "Rick Dangerous" fue un juego que se situó a medio camino entre el más endiablado arcade de plataformas y habilidad y la más retadora video aventura. Fue un juego magnífico en todos los sentidos. Pero vamos a examinar, más de cerca, este título.
Sí, como decía más arriba, este juego se caracterizaba por mezclar dos géneros básicos en todo lo que fue la trayectoria de los 8 bits: arcade plataformas y vídeo aventura, sin bien, no a partes iguales. Había mucho más arcade que vídeo aventura.
Manejábamos a un "pequeño" aventurero llamado "Rick Dangerous" por tres fases distintas. En cada una de las tres fases había infinidad de pantallas a superar, es decir, era el "típico" juego en el que se te presentaba una pantalla con una serie de dificultades particulares. En unas ocasiones debíamos de utilizar nuestra habilidad y reflejos (y me acuerdo de algún que otro joystick que no vivio para contarlo...) y en otras nuestro ingenio. Siempre había una solución pese a que algunas pantallas parecían realmente imposibles. Quizás la mayor virtud de este juego era la capacidad que tenía para atraer la atención del jugador. Derrepente te veías corriendo a todo meter y matando y esquivando enemigos como un poseso para llegar a salvo al final de la pantalla mientras que en otras, tenías que estudiar al milímetro los movimientos que debías de hacer en cuanto estuvieses dispuesto a atravesar la pantalla como un auténtico India... esteee "Rick Dangerous" ;-).
Sin ir más lejos, nada más comenzar la partida y avanzar apenas unos pasos, salía detrás de ti una enorme bola de piedra rodando sin parar. Obviamente tenías que salir pitando para que no te pillará, no podías detenerte ni un momento y, justo cuando habías atravesado 2 o 3 pantallas, tenías que saltar al "vació" y evitar que la piedra de espachurrara. Os estaréis acordando de "Indiana Jones en Busca del Arca Perdida", ¿no?.
![]() |
Para remarcar más el carácter semi-cómico del juego, los personajes eran pequeños y regordetes, es decir, parecían auténticos "monigotes" y hasta su expresión era graciosa. Los escenarios estaban realizados en perfecta sintonía con lo que debía de transmitir el juego, es decir, estaban muy bien pero no por ello eran, por así decirlo, excelentes. Cumplían su cometido pero, la verdad, es que daban igual las posibles excelencias gráficas porque el "Rick Dangerous" era de esos juegos en los que la persona que lo está probando no se fija en los gráficos sino en el juego en sí. Podías estar horas tras horas intentando pasar de fase, llegando a la dichosa pantalla que siempre te mataban porque no sabías muy bien cómo hacer para lograr superarla, te podía poner de mal humor (ahhh mi joystick :-), en fin, era un juego de esos que se comían nuestras tardes de fin de semana sin que nos diéramos cuenta...
Cómo ya comenté, el "Rick Dangerous", se basaba por entero en ir atravesando pantalla tras pantalla. Unas veces se iba rápido porque eran, básicamente, de acción, es decir, tenías que saber saltar rápidamente y matar a cuantos estuvieran delante de ti haciendo cada una de las acciones casi de memoria. En otras, sin embargo, debías de parar y meditar qué hacer antes de llevar a acabo tus acciones. El juego provocaba que el jugado pensara y ejecutara movimientos "milimétricos" que requerían una alta habilidad. Era realmente difícil.
Para poder avanzar en nuestra aventura el bueno de Rick disponía de una especie de estaca de madera con la que poner fuera de órbita a sus enemigos, eso sin contar con sus espectaculares saltos que bien valían un 50% del éxito en nuestro avance. Otras de las "facilidades" con las que contábamos era nuestra pistola que tenía balas limitadas con lo que debíamos de ir encontrando munición por el camino (bastante escasa, por cierto...). Además de la pistola, también disponíamos de cartuchos de dinamita. Sí, por supuesto limitados...
El juego tenía tres grandes fases. La primera transcurría en un templo Azteca, la segunda en una pirámide Egipcia y la tercera en un castillo nací. En cada una de ellas, debíamos de conseguir un determinado objeto o realizar una acción específica. Todo esto venía a dar este toque "video aventurero" al juego aunque este no llegara al 50% del mismo.
Sí, el "Rick Dangerous" fue un éxito claro tanto que se hizo una segunda parte en relativamente poco tiempo. En la segunda entrega, Rick, debía de enfrentarse con los extraterrestres.
Pues qué os voy a decir. Más, mucho más de lo mismo pero ni por asomo, repetitivo. Volvíamos a tener montones de pantallas para poner a prueba nuestros nervios, nuestra habilidad y nuestra capacidad de control... y es que, de nuevo, Rick lograba arrebatarnos tarde tras tarde sin que apenas nos diese tiempo. Un gran juego otra vez.
Muy pocos juegos han logrado tener tan alta adicción. Bueno, la verdad es que los que comentamos aquí fueron y son grandes clásicos y excelentes en todos los aspectos. Del "Rick Dangerous" cualquiera que lo haya jugado, suficientemente, recordará algo único. No se qué tenía este juego pero lograba, sin quererlo, absorberte por completo. Quizás el motivo sea que era el típico juego que no te esperas que de tanto de sí, que no venía anunciado a "bombo y platillo", en definitiva, un juego increíblemente difícil y adictivo y, por supuesto, digno de aparecer en un "Museo sobre Videojuegos".
|
|