Macedonia de Ocio


Wataro Yoshizumi
Marmalade Boy / Macedonia Nipona


Artículo realizado por
Samuel Rísquez






Resumen del tomo I. Capítulo 4.

Son vacaciones de verano. Aún así, en Japón es costumbre que los alumnos sigan yendo a los clubes del colegio, sean la asignatura que sean, así que Miki sigue entrenándose con el tenis. A los ojos de Namura, es muy buena...

Llega Yuu. A Miki le extraña. Si no pertenece a ningún club, ¿qué hace allí?

Como todo ha vuelto a la normalidad, _Yuu también: le hace otra broma pesada a los ojos de Miki. Y ella sigue preguntándose porqué lo hace...

Más tarde descubrimos qué hace Yuu allí: va a la biblioteca.

Allí se encuentra con Meiko que le explica que forma parte del club de literatura y que hace ensayos sobre las obras que más le gustan. Incluso consigue colarle un ejemplar de la revista que el club edita...

Meiko sale a encontrarse con Miki, y van a charlar a un bar. Meiko le dice que se ha encontrado a Yuu en la biblioteca. Miki ya no entiende nada. ¿Cómo puede ser Yuu tan raro y misterioso? También hablan de que Yuu es muy solitario, se va incluso sólo de viaje... Y a Miki, con quien en teoría debería llevarse bien, no le dice nunca nada sobre lo que hace...

Chiyako llega a casa con buenas noticias: su empresa le ha regalado unas entradas para un nuevo parque de atracciones, el Wonder Dog, y se las ofrece. Yuu, como siempre tan raro, le dice a Miki (sin tan sólo preguntarle su opinión) que irán mañana. Le dice simplemente <<¿O.K.?>> y se va sin apenas esperar respuesta. Miki piensa que sigue tan raro como de costumbre.

El Wonder Dog es un parque con muchos juegos virtuales. Miki y Yuu juegan a ellos, obteniendo siempre ella la peor puntuación y él la máxima. Como es natural, Yuu se ríe de ello.

Pasan por delante de una de ésas máquinas con peluches, con un gancho que moviendo adecuadamente te recoge el que quieras. Miki se queda encaprichada de uno, y Yuu, murmurando, accede a cogérselo. Pero el que le da ni siquiera se acerca a lo que ella quería... Es un muñeco del Pez Kappa (que también sale en Mintna Bokura, obra posterior de Yoshizumi).

Ambos van a entrar en el laberinto de espejos. Pero una misteriosa chica impide a Yuu que lo haga, dejando a Miki sola allí dentro.

Cuándo consigue encontrar la salida, se encuentra a la chica misteriosa (que ella no había visto) y a Yuu hablando. Él se la presenta: es Arimi, una vieja compañera suya. Se intercambian teléfonos, y Arimi se agarra sin ningún perjuicio a Yuu... Eso pone a Miki de los nervios.

Un chico llama a Arimi desde lejos. Yuu le dice que se alegra de que ahora tenga novio (aún no ha dicho nada más sobre Arimi a Miki), pero ella le dice que le prefiere a él, y se va. Entonces Miki, como es lógico, le pide explicaciones.

Al parecer estuvieron saliendo, e hicieron “lo normal”... Miki piensa bastante mal. Los niños japoneses dividen el noviazgo y matrimonio en cuatro pasos, asignando una letra a cada uno: “A” para besarse, “B” para acariciarse, “C” para “hacerlo” y “D” para tener un hijo. Y Miki no podía ser más mal pensada, y Yuu lo detecta... Le dice: <<no, simplemente Navidad, cumpleaños, esas cosas”. Miki se tranquiliza, y Yuu aprovecha para ponerla nerviosa (¡quién sabe cuántos segundos pararan hasta tener otra oportunidad!).

Miki, verdaderamente enfadada, recibe un nuevo ataque de Yuu: él reconoce que su primer beso fue con ella. Entonces Miki descubre que Yuu ya sospechaba que estaba despierta. Ella le pregunta porqué lo hizo. Él vuelve a bromear, pero ante las “buenas” formas de Miki, reconoce que le quiere. Miki se lo toma como una broma pesada más, le da un buen bofetón y se larga. A Yuu le gusta esa reacción (no, si ya sabía yo que...).

Al volver de las vacaciones, Yuu y Miki son noticia: una chica les vio paseando por el Wonder Dog. Ginta y Meiko, que escuchan como la chica se lo dice a otra, se impresionan. Sobretodo él.

Ginta ya no aguanta más, y cuestiona porqué Miki pasa tanto rato con Yuu si lo odiaba. Meiko le para los pies. Le dice que él ya tuvo su oportunidad, pero la perdió porque quiso. Ginta se sorpende.

Miki y Ginta son los encargados esa semana de pasar la lista por la tarde, para saber quién ha ido a clase y quien no. Se sientan, y mientras lo hacen Miki piensa en Arimi, la chica del Wonder Dog.

Miki está comiendo un caramelo, que según dicen sabe a beso. Pero ellos dos dicen que no saben si es cierto. Y Ginta dice: <<¿Y si lo probamos?>>.

ÚLTIMA REVISIÓN EN ABRIL DE 1999




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